Las aventuras de John Dolittle fueron llevadas a la pantalla grande por primera vez en 1967, dirigidas por Richard Fleischer, con Rex Harrison como el galeno que habla con animales. Eddie Murphy lo revivió tres décadas después, en una comedia de Betty Thomas que, aunque perdió el encanto original, tuvo dos exitosas secuelas. Luego de actuar como el hombre de acero, el popular actor Robert Downey junior decidió revivir el personaje, bajo el mando de Stephen Gaghan.
De acuerdo con el guion del propio realizador y de Dan Mcgregor, Dolittle (Robert Downey junior) quedó devastado por la muerte de su esposa Eliza y ha estado recluido en su santuario durante los últimos siete años; de pronto, aparece el joven Tommy Stubbins (Harry Colley) con una ardilla que hirió. Su llegada coincide con la de una mensajera que anuncia que la reina Victoria (Jessica Buckley) está gravemente enferma y el único que puede salvarla es Dolittle, pero requiere de un fruto del árbol del paraíso y, de inmediato, parten en su busca.
El director de Sin rastro emprende su trabajo más ambicioso, con múltiples animales parlantesanimatrónicos y un reparto complementado por Antonio Banderas y Michael Sheen.
Dolittle es, pues, la típica cinta palomera que puede ver toda la familia, sin pedir algo más que 101minutos de entretenimiento.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
