Esta noche fueron vinculados a proceso los dos policías procesales señalados como presuntos responsables de la fuga de dos reos el pasado martes 5 de noviembre en el municipio de Mixquiahuala.
A pesar de que la defensa argumentó que ambas personas fueron víctimas al ser interceptadas por un grupo armado que los amenazó, encañonó y desarmó para lograr la evasión de tres presos señalados de secuestro, la agente del Ministerio Público aseguró que pudieron evitar la fuga si hubieran solicitado apoyo a más corporaciones y tomado las previsiones necesarias.
En este contexto, afuera del Juzgado de Oralidad de Mixquiahuala fueron colocadas pancartas en las que se asegura que los elementos de esta corporación trabajan sin la debida protección ni equipo necesario, toda vez que no cuentan siquiera con un auto rotulado, mucho menos una patrulla oficial, ni tampoco equipo de radiocomunicaciones ni chalecos antibalas, por mencionar algunas carencias.
Esta situación fue confirmada por los propios compañeros de los hoy procesados en días pasados, quienes nuevamente solicitaron la intervención del Ejecutivo estatal para incrementar el personal de esta instancia, pues únicamente cuenta con 58 efectivos para todo el estado.
Durante la audiencia, el juez de control los vinculó a proceso y dio dos meses de plazo para la investigación complementaria. En tanto, los agentes permanecerán detenidos en el Centro de Reinserción Social de Pachuca.
Los familiares y el abogado subrayaron que únicamente actuaron para proteger su vida ante la amenaza de un comando que los superaba en número y armamento, por lo que apelaron para que el secretario de Seguridad Pública, Salvador Cruz Neri, y la directora de la Unidad de Medidas Cautelares, Eva Pérez, realicen las gestiones necesarias para presentar las pruebas a su favor.
Es importante señalar que, de ser hallados culpables, podrían ser condenados a ocho años de prisión por el delito de evasión de presos.