UAEH: Esteban no renuncia y reta a alumnos en paro

«No importa cuántas veces lo nieguen, pero llegaron con el rostro cubierto y armados, con tubos, martillos, tijeras de jardinería y gas pimienta”.

Durante sesión extraordinaria del Honorable Consejo Universitario y tras negarse a renunciar a su cargo, tal como exigen los estudiantes que se mantienen en paro, el presidente del Consejo Estudiantil Universitario del Estado de Hidalgo (CEUEH), Esteban Rodríguez Dávila, comprometió que su última acción al frente del organismo será promover, «por primera vez en la historia», una elección directa y universal para la renovación de su dirigencia.

«Es decir, que el 100 por ciento de la comunidad pueda votar para elegir a su máximo dirigente», expresó para recalcar que su nombramiento al frente del organismo es legítimo debido a que aún es alumno y cuenta con el respaldo de los representantes estudiantiles.

A su vez, agradeció el exhorto que durante la sesión le realizó el máximo órgano universitario para dar paso al proceso de renovación de su estructura; sin embargo, añadió que no era necesario, toda vez que «pronto será publicada una nueva convocatoria, la organización tendrá en breve una nueva presidencia y quiero aprovechar el pódium para decir que me despediré agradecido, feliz y orgulloso del trabajo que hemos realizado».

RESPONSABILIZA A ESTUDIANTES DE HECHOS VIOLENTOS

El líder del CEUEH se remontó nuevamente a los hechos ocurridos el pasado 19 de septiembre para responsabilizar a los estudiantes de los hechos violentos: «No importa cuántas veces lo nieguen, pero llegaron con el rostro cubierto y armados, con tubos, martillos, tijeras de jardinería y gas pimienta».

En el discurso, que ocupó para limpiar su imagen, también desmintió que se hubiera presentado en las instalaciones con un grupo de choque para reprimir a estudiantes, pese a que existen videos en los que aparece golpeando a estudiantes.

SEÑALA A ESTUDIANTES DE COMETER VARIOS DELITOS

En su lugar, responsabilizó a estudiantes del Instituto de Artes, a los que calificó como un grupo radical, para señalarlos de cometer varios delitos como apología del odio, robo de un Garzabús, privación ilegal de la libertad, daño en propiedad de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), acopio de armas prohibidas, lesiones, tentativa de homicidio y ataque a las vías de comunicación. También cuestionó la legalidad del paro.

«Sé que sus titiriteros les dijeron que podían respaldar sus acciones en su derecho de paro, pero lamento decirles que ese derecho de paro no existe. La figura de paro no está contemplada en la legislación del país. El supuesto paro no es más que el delito de despojo agravado que amerita 12 años de prisión y que consiste en impedir materialmente el uso y disfrute de un inmueble ajeno, con tres agravantes: haberse realizado con lujo de violencia, por más de cinco personas y en instalaciones destinadas a la educación», señaló.

En respuesta a las peticiones de los paristas que exigen su renuncia, el dirigente estudiantil expuso que sólo lo haría en caso de que quienes participaron en la movilización de Abasolo 600 acepten las faltas que cometieron y las sanciones correspondientes, «incluida la baja definitiva de la institución».

SESIÓN CAUSA INCONFORMIDADES

Al final de la sesión del Consejo, en la que participó el rector Octavio Castillo Acosta, los estudiantes inconformes se manifestaron en el exterior del edificio central, reprochando el rompimiento de acuerdos establecidos previamente en el pliego petitorio, entre estos el impedimento del acceso a siete alumnos representantes del movimiento.

El hecho de que la máxima casa de estudios cobijara a Esteban Rodríguez Dávila también causó molestia entre el alumnado, que considera que existen evidencias suficientes para separarlo de su cargo. A su salida del Centro Cultural Universitario La Garza, los paristas enfrentaron al rector y convocaron a una reunión pública en Plaza Juárez para mediar en el conflicto.


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