Luego de haber sido detenido en estado de ebriedad y agredido a oficiales de la Policía municipal, el exedil de Tlaxcoapan, Miguel Ángel López Hernández, fue vinculado ayer a proceso por ultrajes, tráfico de influencias y abuso de autoridad.
Los hechos por los que el también regidor fue imputado ocurrieron el 6 del presente en la demarcación cuando fue asegurado bajo los influjos del alcohol, pero durante el proceso aseguró gozar de fuero constitucional por ser integrante de la asamblea local.
Además, el extitular del Ejecutivo de Tlaxcoapan en dos ocasiones bajo las siglas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) presuntamente habría agredido a oficiales e incluso le provocó lesiones a uno de ellos.
Por lo que fue puesto a disposición y posteriormente presentado ante el Ministerio Público (MP) para resolver su situación legal; ante ello, fue instruido realizar las investigaciones y reunir datos de prueba contra el probable.
Ya en audiencia inicial, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) formuló la imputación contra López Hernández y solicitó al juez de control su vinculación a proceso.
Con base en intervenciones por personal ministerial de la subprocuraduría poniente y los datos presentados, la autoridad judicial determinó proceder y le dictó varias medidas cautelares a cumplir.
Tales son presentación periódica ante el juez, prohibición de acudir a determinadas reuniones o lugares, negativa a convivir o comunicarse con las víctimas, así como someterse al cuidado o vigilancia de una persona o institución.
Finalmente, el juzgador añadió un plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria, tiempo en el que el exedil de Tlaxcoapan deberá cumplir las directrices que le fijó la autoridad.