La instalación del gasoducto Tula-Villa de Reyes a cargo de la empresa TC Energy (antes TransCanada Corporation) genera incertidumbre en la comunidad de San Antonio, municipio de Tula, porque no se ha informado a la población qué se trasladará, pues se teme que aumente la violencia como ocurre por el robo de hidrocarburos, delito con alta incidencia en la región.
Vecinos y vecinas de la localidad indicaron que no se les ha informado cuáles son las condiciones en que se establecerá este ducto. “El ducto pasa cerca de la comunidad de San Antonio y no se sabe si es gasolina o gas, pues es preocupante; es como un fantasma”, expresó una mujer de la localidad.
La ciudadana detalló que el robo de combustible en esa zona ha generado enfrentamientos y mucha violencia, por lo que no desean que esto aumente, expresó durante la Mesa de Acercamiento con el Gobierno de Hidalgo llevada a cabo en Tula esta tarde.
En este sentido, Erika Toledo, integrante de la dirección general de Asuntos Agrarios del Gobierno estatal, indicó que la construcción del ramal Tula-Villa Reyes es importante para la instalación de empresas en la región porque se dotará de gas natural.
Sin embargo, confirmó que está detenido el proyecto en puntos de propiedad ejidal: “Hay trabas por parte de los núcleos ejidales. Si no se aprueban dejarían fuera importantes proyectos y las inversiones”, expresó la funcionaria, que se dijo dispuesta a informar de cómo se les pagaría el derecho de vía.
A esta mesa de acercamiento no acudió el alcalde Manuel Hernández Badillo.
Si bien este proyecto es de tipo federal, a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en la zona aún no se han hecho las consultas ni las jornadas informativas, pues los vecinos y vecinas desconocen las condiciones que este tendrá y el riesgo que les representa.