Sospechosa guerra sucia contra Raúl Camacho Baños

Hace unos días corrió como pólvora la noticia sobre una denuncia por fraude en contra del padre de Raúl Camacho Baños, alcalde de Mineral de la Reforma por el Partido Acción Nacional, escándalo que mantiene saturadas primeras planas, trascendidos y diversos espacios de los medios locales de la entidad.

Mediáticamente significa un golpe fulminante a Camacho Baños, casualmente en vísperas de los comicios electorales en los que figuraba como posible candidato a diputado federal, en lo que parece una guerra sucia interna en el albiazul para frenar y restar la fuerza política que había adquirido.

Diversas hipótesis se han estructurado sobre la procedencia de este ataque, aunque las más sonadas obedecen a su competencia panista, pues en este momento comienzan a gestarse grupos de poder que podrían apoderarse de la capital pachuqueña recibiendo grandes beneficios de negociaciones y espacios políticos.

Pese a la tremenda alharaca en torno a Raúl Camacho, los dichos no han logrado causar estragos en la ciudadanía, o por lo menos no los suficientes para que broten manifestaciones pidiendo su destitución, puesto que la posibilidad de ser removido de su encargo está presente al hacerse público que las cantidades en cuestión fueron utilizadas para financiar su campaña política en 2016.

Casualmente, en días previos a la noticia sobre el fraude salió a relucir que a Filiberto Hernández, exalcalde de Mineral de la Reforma por el Partido Revolucionario Institucional y de quien existe un expediente armado por desvío de recursos -que fue más que evidente durante su administración-, se le vio muy tranquilo visitando Real del Monte, hecho que ha causado tremenda controversia, porque mientras el priista no ha sido tocado por la justicia, es a Camacho Baños a quien se le acusa de financiamiento ilegal.

Es necesario decir que un gran porcentaje de mineralenses desacredita la guerra sucia contra el alcalde y la atribuye a un fuego amigo que busca perseguirlo para que no siga creciendo; ese mismo grupo de ciudadanos le da su apoyo manifestando que, “bien que mal”, él si está trabajando y que los resultados ya son palpables en el municipio, basta decir que las calles de Mineral de la Reforma están en remodelación, o por lo menos en mejores condiciones que las de Pachuca.

El alumbrado público, también, de pronto existe en esta administración; los servicios de recolección de basura marchan perfectamente; el suministro de agua ha tenido mejores épocas que con Filiberto Hernández; el comercio ambulante está menos presente que en Pachuca; el cierre de centros nocturnos ha permitido un giro total en materia de seguridad; los trámites en la presidencia municipal son más rápidos sin fama de pedir “mochada”; existe apertura al diálogo directo con el alcalde; cuenta con coordinación al interior del Cabildo; no ha dado muestras de despilfarro o gasto excesivo; el informe de actividades se realizó de acuerdo a la petición del gobernador Omar Fayad Meneses de atender a la austeridad; el trabajo municipal se realiza en coordinación con el nivel estatal y federal; se generó, en el momento oportuno, una carpeta de investigación contra la corrupción del alcalde anterior y, en pocas palabras, pese a la lentitud para resolver algunos problemas municipales, se puede decir que Raúl Camacho está cumpliendo sus promesas de campaña y tratando de rescatar lo que Filiberto Hernández había hundido en la corrupción.

Sin embargo, Camacho Baños corre el riesgo de ser destituido del cargo para el que fue elegido por la mayoría de mineralenses, de lo cual sólo se puede percibir el miedo al despunte de la carrera política de quien en años subsecuentes podría presentarse como la mejor opción panista para encabezar la competencia por la gubernatura y regalar a Hidalgo la alternancia política.

Cuestión de tiempo será, observaremos atentos un procedimiento cuyos alcances mediáticos no han sido suficientes para disminuir la imagen de Raúl Camacho; probablemente esta situación pueda generar mayores reflectores, pero en las calles de Mineral de la Reforma los ciudadanos prefieren a su actual alcalde que al que se fue y no se le ha girado orden de aprehensión.