Redacción
La alerta que se generó el fin de semana pasado por la desaparición de una mujer que supuestamente estaba en etapa final de su embarazo y al ser hallada dos días después, en el Estado de México, no había rastros del bebé, y que inclusive derivó en rumores de una posible extirpación, motivó la intervención de la clínica en la que fue ingresada, la cual desmintió que la fémina tuviera siquiera señales de un embarazo reciente.
“Con la finalidad de evitar que se genere algún tipo de psicosis: de acuerdo con los datos obtenidos en la investigación, se confirmó mediante estudios médicos que Y. C. A. (la reportada como desaparecida) no se encuentra en estado de puerperio o posparto, no presenta dato clínico de embarazo reciente, por tanto, no hay producto en gestación que le haya sido sustraído, y mucho menos algún bebé que las autoridades deban de estar buscando; de ello existe sustento técnico-científico”, dice textualmente el comunicado.
La desaparición de la mujer, de iniciales Y.C.A., fue reportada el 9 de marzo en la agencia del Ministerio Público de Ciudad Sahagún por su esposo, quien aseguró que estaba embarazada. Por ello de inmediato se dio intervención a la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJEH), instancia que ahora deberá seguir investigando el hecho.