A raíz de las manifestaciones por parte de trabajadores sindicalizados al servicio del ayuntamiento de Tizayuca, la alcaldesa Susana Ángeles Quezada rechazó las agresiones registradas a funcionarios de la Secretaría de Finanzas municipal, e instó al diálogo y a la concertación para alcanzar algún tipo de acuerdo respecto a su remuneración.
Al respecto, la mandataria describió que, de acuerdo con el contrato colectivo de trabajo por parte de los sindicalizados se establece que tienen el derecho a un bono equivalente a 10 días de salario, y que a lo largo del documento se cuenta con dos conceptos: el salario integrado, el cual es el total del sueldo base más compensaciones, y el salario nominal solo es el salario sin algún tipo de modificación.
Afirmó que, para el pago del salario para el mes de julio se calculó este bono tomando en cuenta el salario nominal, y añadió que, de forma “tradicional” se había hecho el cálculo con el salario integrado como base, y en donde se comprobó que la diferencia de un cálculo y otro era de casi medio millón de pesos.
En ese sentido, declaró que “de manera responsable, sin violentar ningún derecho de los trabajadores, se hizo el cálculo respecto del salario nominal para poder entregar lo que corresponde por derecho a los trabajadores, pero también dejar de comprometer un recurso que puede ser utilizado para cuestiones diversas”.
Derivado de esta situación, la mandataria refirió que, en lugar de un diálogo por parte de los sindicalizados, hubo amedrentamiento hacia el personal de la Secretaría de Finanzas, “son actos que lamentamos y que reprobamos, porque nunca jamás la amenaza, la violencia y la intransigencia será la manera de sacar adelante nuestro municipio”, dijo.
En cambio, Susana Ángeles señaló que personal de dicha dependencia municipal fue retenido por los sindicalizados en un espacio de 18 horas, y denunció que los afectados por estas acciones fueron sujetos de violencia psicológica, “con ruidos intimidantes y golpes a las puertas y con ofensas a nuestra tesorera”.
Sobre lo registrado, la alcaldesa hizo un llamado a los trabajadores sindicalizados al servicio del ayuntamiento y a los líderes sindicales a que, en caso de cualquier controversia en cuanto a su contrato colectivo de trabajo, se realicen mesas de trabajo en lugar de emplear las amenazas como método para alcanzar un acuerdo.
“Todos somos trabajadores del pueblo tizayuquense, y necesitamos ponernos de acuerdo para poder entregar mejores bienes y servicios a la población; que no se nos olvide: más allá de nuestras relaciones contractuales y laborales, todos somos servidores públicos y debemos tener los mismos valores, como el respeto a las leyes e instituciones para que podamos ser el buen ejemplo de la gente que está allá afuera”, concluyó.