El pasado martes 17 de diciembre, el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, se desvaneció en Actopan mientras recorría los stands de la Feria de Servicios, parte de las Rutas de la Transformación que ese día se realizaban en esa demarcación.
Este hecho ocurrió a poco más de dos años de haber asumido la titularidad del Ejecutivo. Según informó el área de Comunicación Social, no se trató de nada grave, sino de un cuadro de cansancio debido a las extenuantes jornadas de trabajo.
Hasta este viernes 20 de diciembre, el reporte indica que el mandatario continúa en casa guardando reposo y con un estado de salud estable.
En el sexenio pasado, encabezado por Omar Fayad Meneses, también se registraron incidentes de salud que detuvieron temporalmente su agenda. Uno de los casos más relevantes ocurrió el 31 de agosto de 2021, cuando informó a través de sus redes sociales que se encontraba hospitalizado por un cuadro de salmonelosis.
En su momento explicó que desde días previos había presentado malestares estomacales que derivaron en la afección, aunque ya estaba bajo atención médica. Como era de esperarse, recibió miles de mensajes, tanto de pronta recuperación como otros con comentarios desafortunados.
Durante la pandemia, el ahora embajador de México en Noruega informó a través de sus redes sociales que había contraído Covid-19, convirtiéndose en el primer gobernador del país en dar positivo a esta enfermedad. Las complicaciones derivadas del virus llevaron posteriormente a la extirpación de una parte de uno de sus pulmones.
En sexenios anteriores no se recuerdan incidentes similares, pero es importante señalar que la comunicación no era tan inmediata como lo es ahora con el uso de redes sociales. Es probable que hayan ocurrido situaciones de salud que no trascendieron a la opinión pública, ya que, antes que políticos, los gobernadores son personas como cualquier otra: vulnerables e imperfectas.
