Pareciera una de las últimas oportunidades de ver cine argentino tras el triunfo del derechista Javier Milei.
Di Tella nació el 16 de noviembre de 1958 y tras dedicarse al periodismo se puso tras de la cámara en 1997 con Prohibido.
Una de sus cintas más representativas es Hachazos realizada en el 2011.
En ella Di Tella sigue los pasos del singular director Claudio Caldini.
El realizador confiesa que durante su niñez vio como Caldini filmaba una película y tras no saber de él, lo reencontró y recreó algunas de sus historias.
Caldini se exilió en la India durante la dictadura militar y en ese país tuvo una crisis. Repatriado, sin hogar y sin familia, se vio obligado a vivir en 30 lugares diferentes, hasta que encontró trabajo como cuidador de una finca, lo que le permitió reemprender su carrera cinematográfica dando seminarios y exhibiendo por vez primera algunas de sus películas.
Di Tella no puede ocultar su simpatía por este singular personaje que amarraba una cámara de super 8 a un árbol y la veía desenrollarse. o que filmaba un paisaje en la India a bordo de una bicicleta.
Trata de reconstruir algunos de los trabajos de Caldini, pero con la conciencia de que fueron experiencias irrepetibles, algunas de las cuales guarda celosamente en una valija.
Hachazos resulta un entrañable homenaje a un desconocido y singular director argentino.
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Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.