Nada tan brutal ni tan controvertido como el pronunciamiento de Morena Hidalgo sobre la desaparición de los poderes públicos. De concretarse tal medida, en primer término el Senado de la República tendría que decidir que en términos estrictos existe un abuso o arbitrariedad jurídico-política que amerite la desaparición de poderes y, acto seguido, con las dos terceras partes del Senado aprobar una terna para ser presentada al presidente de la República, quien debería nombrar a un gobernador provisional, quien a su vez tendría la obligación de convocar a elecciones bajo los mecanismos constitucionales de Hidalgo y generar las condiciones para este proceso electoral que integre los poderes públicos.
La hipótesis política estriba en que, de lograrlo, Morena podría garantizar no sólo afirmarse en la Cámara de Diputados, sino también podría asegurar que tanto el Poder Ejecutivo (gubernatura) como el Poder Judicial los detentara y crear con ello un gobierno inédito en Hidalgo.
Si aceptamos la hipótesis, tendríamos un aparato público y servidores públicos provenientes, principalmente, de las filas de Morena, más empleados de base o sindicalizados de toda la vida en las estructuras del gobierno en Hidalgo.
¿Cuál sería el impacto en el ejercicio de gobierno? Iniciarían formas de operación política de acuerdo a los intereses del gobierno de Manuelovich, por lo que las lógicas no sólo administrativas, sino también sociales, cambiarían, creando formas de conducción política que podrían pavimentar una nueva conciencia e ideología en los sectores desposeídos de la población.
Se crearía una nueva elite en el poder, la cual podría prolongarse 12 años, porque la fuerza y capital político alcanzado por el tabasqueño podría operar por más de un sexenio, condición suficiente para afianzar la fuerza de Morena no sólo en Hidalgo, sino en el país.
En suma, si Morena postula su pronunciamiento de la desaparición de podres y lo gana, borrará toda huella priista en lo inmediato y, a posteriori, formará estructuras políticas que harán difícil su destierro de Hidalgo.
Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.
