Pese a que el viernes ofrecieron el mejor juego del año, los Piratas de Campeche fueron barridos en el Fray Nano por los Diablos Rojos y acrecentaron la crisis por la que pasan, que motivó el despido de su manager, Daniel Fernández, con el que habían terminado la primera minicampaña en penúltimo lugar con 22 victorias por 34 derrotas.
Ahora, bajo el mando del venezolano Rómulo Martínez, los filibusteros batallaron 16 entradas antes de caer por 5 carreras a 4 ante los pingos al inicio de la serie. Pero parece ser que el esfuerzo los cansó y fueron apaleados en los dos juegos siguientes por 8 a 3 y 12 a 3.
El pitcheo campechano está encabezado por los veteranos Francisco Campos, en busca de su victoria 200, y Orlando Lara con Marco Carrillo, y por el cubano Armando Rivero.
A la ofensiva brillan Asael Sánchez, quien pelea el título de bateo, con los importados siempre cumplidores Olmo Rosario y Henry Rodríguez, sin que los otros extranjeros: Yosmany Guerra, Alberto Querales y Danry Vázquez, hagan la diferencia.
La base nacional se completa con Paul León, Jason Atondo y el catcher Fernando Flores, y para el relevo está Isidro Márquez, hijo del legendario bombero con más rescates en la Liga, y el venezolano Alejandro Arteaga.
Con todo, se antoja un plantel bastante limitado que difícilmente aspira a la postemporada, pero que ojalá apoye a Pancho Ponches para llegar a las 200 victorias.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.