Alma Tovar Pérez, directora de Comercio y Abasto del Ayuntamiento de Pachuca, reconoció que existe insuficiencia operativa en la vigilancia del comercio ambulante, especialmente durante los fines de semana, cuando vendedores de otros municipios se hacen presentes.
Afirmó que, a pesar de que todos los vendedores violan la normativa, a dos meses de finalizar la administración municipal aún se evalúa la posibilidad de reubicar o retirar a los cientos de comerciantes que ocupan las calles del primer cuadro de la ciudad. Lo anterior, abundó, cuidando la protección de sus derechos humanos y las medidas de protección civil.
Recordó que desde 1993 existe un decreto que prohíbe el comercio ambulante. Sin embargo, actualmente hay 17 amparos que protegen su permanencia, por lo que la alcaldía está a la espera de las decisiones judiciales para proceder en consecuencia.
Asimismo, informó que se cuenta con documentación que respalda el pago realizado por 137 personas a la alcaldía por concepto de permisos. Recalcó que durante la presente administración no se han otorgado autorizaciones para la instalación de más puestos.
En este contexto, enfatizó que este problema se originó debido a descuidos por parte de quienes estuvieron al frente de la instancia a su cargo en administraciones anteriores.
