Las acusaciones por la detección de un boquete financiero son una “cortina de humo” ante la crisis que enfrenta el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Hidalgo y el resto del país, señaló Julio Valera Piedras, ex presidente del instituto político, quien renunció junto con siete diputados locales, el ex gobernador Omar Fayad, 15 alcaldes, y ediles.
Valera Piedras, con datos generales contenidos en gráficos, informó que entregaron las cuentas claras y descartó los señalamientos de desvíos de recursos y multas por hasta 25 millones de pesos.
Informó que la prerrogativa actual es de un millón 584 mil pesos, pero cerca de 396 mil pesos son destinados al pago de multas, por lo que el resto se destina a la operatividad. Y describió que la nómina mensual es de 810 mil pesos y el pago de servicios es de 176 mil pesos.
“De dónde sacan ese boquete de 25 millones de pesos si no tenemos este recurso”, cuestionó. Sin embargo, no dio detalles sobre las dos multas pendientes.
Entre los puntos, que no se aclararon en su totalidad, están los montos por laudos laborales que son de 3 millones de pesos, pero que en litigios estarían involucrados casi 5 millones de pesos.
Sin embargo, aceptó que dos automóviles fueron embargados por el pago de laudos.
