El estreno más interesante de la semana es La mula, la más reciente cinta del veterano Clint Eastwood, basada en un hecho real.
El guión de Sam Dolnick parte de un artículo de Nick Schenk aparecido en The New York Times.
El nonagenario horticultor Earl Stone (el propio Eastwood), ganador de premios en todas las ferias, a las que asistía sacrificando a la propia familia, queda en la calle a causa de las ventas por Internet.
Durante la boda de su nieta Ginny (Taisa Formiga), un desconocido le propone ganar dinero transportando mercancía a otro estado.
Aunque sospecha que puede tratarse de droga, el Tata, como lo apodan sus empleadores, decide aceptar, pues se trata de dinero fácil, que se va haciendo cada vez más difícil, cuando le colocan un supervisor.
Al mismo tiempo llega a la región el agente de la DEA, Colin Bates (Bradley Cooper), quien endurece la búsqueda de narcotraficantes, al tiempo que Earl trata de restablecer las relaciones con su familia, su ex (Diane Weist) y su hija.
Eastwood está consciente de su edad y hasta bromea sobre ella y el viagra. El filme recuerda un poco la espléndida Gran Torino, que confirma que ya no se trata de un héroe de acción.
The mule, término que usan los narcos para designar a quienes transportan droga, es un interesante y conmovedor filme que mantiene el suspenso hasta el final y que confirma que Eastwood es uno de los más importantes directores de las últimas cuatro décadas y que como Woody Allen, se mantienen estoicamente filmando.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
