Los Piratas de Campeche tuvieron una temporada decepcionante bajo el mando del norteamericano Tim Johnson y luego de su sucesor Jesús Sommers, con 47 ganados y 68 perdidos.
Uno de los pocos intereses que tuvieron los campechanos fue ver a Francisco Campos llegar a las 200 victorias en la Liga Mexicana. Ahora, el legendario lanzador hará su debut como mánager.
Entre lo más rescatable del equipo estuvo su batería, además de la consolidación de Jason Atondo como cañonero, con .336, 4 homerunes y 41 producciones. Estuvo apoyado por el norteamericano Jay Austin, con .329, 15 cuadrangulares y 60 empujadas, y Henry Rodríguez, 23 homerunes y 99 producciones. El otrora champion bat, Olmo Rosario, acumuló .321, con 12 palos de vuelta entera y 74 carreras empujadas.
El verdadero talón de Aquiles de los filibusteros, como el de la mayor parte de los equipos de la Liga, fue el pitcheo. Atrás de Campos, que se retiró tras conseguir las 200 victorias, estuvieron solamente Manuel Flores, con 9 victorias, 8 derrotas y 5.33 en carreras limpias, y Frank García, con 6, 11 y 5.54. La mayoría de los cañoneros importados repetirán, con la adición de Félix T. Pie, el dominicano sublíder de bateo.
Campos ha apostado por lanzadores jóvenes para esta temporada: llegaron el zurdo Romario Gil y los derechos Jaime Lugo y Daniel Flores. El cerrador será, seguramente, Isidro Márquez junior, quien tratará de emular las hazañas de su padre. Estos refuerzos tendrán que funcionar si quieren mejorar en la tabla.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
