El legendario Angel Fernández (1925-2006) se inició en el rey de los deportes. Lalo Orvañanos (1913-2001) fue otro de los pioneros destacados.
Oscar el Rápido Esquivel (1932-1986) fue cronista oficial de los Diablos Rojos dando a sus trasmisiones un toque muy particular y ameno, imprimiendo frases memorables como “la antesala del infierno”.
El exluchador Enrique Llanes (1919-2004) abandonó los encordados para trasmitir los juegos de los Tigres desde el parque del Seguro Social.
Los tres amigos Antonio de Valdés, Enrique Burak y Pepe Segarra trasmitieron durante muchos años tanto a Diablos como a Tigres.
Javier Figueroa, Gustavo Torrero, Miguel Aguilar Caloca y Lalo Saint Martin, regresaron a los medios tras varios años de ausencia, en los que tuvimos que soportar al “turbulento” Agustín Castillo, porrista oficial de los Diablos, famoso por sus crónicas parciales y localistas, y a Karina García, que aprovechó el camino abierto por la buena amiga Mary Paz Gonzáles y por Betty Pereira.
Desgraciadamente la mayoría de los equipos se han olvidado de las trasmisiones radiales y ahora todo lo quieren hacer desde las computadoras por internet, deshaciéndose de un plumazo de las voces que le dieron brillo al Rey de los Deportes.
Y luego se preguntan por qué no hay nuevos aficionados.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.