En un momento de popularidad política del gobierno de Claudia Sheinbaum, la presidenta de México ha hecho público que el gobierno federal ha presentado una denuncia por corrupción en el Infonavit, organismo que estaría aquejado a nivel nacional por diferentes anomalías en sus operaciones que se han detectado tanto en las direcciones sectoriales empresariales como de trabajadores del instituto en sus proyectos de construcción de viviendas.
A finales del año pasado ya se había manifestado que el Infonavit Hidalgo se encontraba señalado por casos de duplicidad de la titularidad de viviendas que presentaban más de un propietario. El caso en particular no manifestó mayores declaraciones en indagatorias por parte de su titular Canek Vázquez Góngora, pero, sin duda, las investigaciones que vendrán por parte de la Fiscalía General de la República (FGR) habrán de profundizar las pesquisas de corrupción con la seriedad del caso, porque la presidenta Claudia Sheinbaum ha indicado que no se tolerará ningún acto de corrupción en su gobierno.
En los hechos de fondo sobre las investigaciones de corrupción del Infonavit a nivel nacional, la presidenta Sheinbaum Pardo le exigió al titular de este instituto, Octavio Romero Oropeza, para que se presenten las denuncias penales ante la FGR y se proceda en indagatorias que realicen un arqueo de la situación más allá de las denuncias inmediatas. Condición que, en Hidalgo, abriría un capítulo de investigaciones en el mandato anterior del exgobernador Omar Fayad Meneses, sexenio en el que penden las pesquisas de la Estafa Siniestra.
La contundencia de la denuncia efectuada por Sheinbaum Pardo no da lugar a equivocaciones de interpretación sobre la firmeza del acto en cuanto a la corrupción que prima en Infonavit; por lo que, con claridad, las investigaciones se realizarán en torno a proyectos de construcción que omitieron las condiciones legales básicas dentro de este instituto de la vivienda.
En los hechos, el titular de Infonavit denunció que “la dirección sectorial empresarial propuso un proyecto para la construcción de 8 mil 852 viviendas con 76 empresas desarrolladoras a las que se entregaron 3 mil millones de pesos. El proyecto no pasó por ningún proceso de evaluación”.
En este escenario, las constructoras que operaron en el desarrollo de fraccionamientos en diferentes estados, y que en Hidalgo incrementaron su presencia de modo significativo en los gobiernos del antiguo régimen, serán investigadas debido a que las anomalías se multiplican en la medida que se están revisando los expedientes de los desarrolladores y de los trabajadores implicados, donde los mandos decisorios y medios del Infonavit ya manifiestan diversas problemáticas en la estructura institucional.
La lógica de la malversación pública en el país en los gobiernos del antiguo régimen se presentó por un esquema claro de filtración de recursos que se daba a través de redes de corrupción que movían el flujo de financiamiento a través de programas sociales y de la operación propia de cada dependencia o institución pública; esto creaba una cadena-red que solía perderse en la serie de actos de opacidad administrativa, los cuales eran encubiertos en la data dura por medio de registros apócrifos, así como del uso de la figura de “fondo perdido”.
En el caso concreto de la Estafa Siniestra en Hidalgo no se ha prescrito el modus operandi de la red de corrupción que primó en la administración del exgobernador Fayad Meneses, pero es evidente que el fenómeno de filtración institucional ocupa uno de los vectores poco o nada aclarados, por lo que las pesquisas sobre funcionarios públicos no alcanzan a develar la estructura de su operación.
Este modus operandi -que en el caso del Infonavit mantiene lógicas análogas en la malversación pública y corrupción- otorga la pauta de que en la medida que los sistemas técnicos otorguen controles férreos sobre el manejo financiero y fracturen la discrecionalidad de los fondos y presupuestos públicos, existirán menores riesgos en el flujo del capital público; sin embargo, ello exige transparencia e incrementar los niveles de visibilidad de la cuenta pública, como lo advirtió el diputado federal por Hidalgo, Daniel Andrade Zurutuza.
La madeja de la corrupción apenas comienza a develar los hilos conductores de las investigaciones que irán a toda la estructura institucional y, en Hidalgo, Infonavit no será la excepción.
