La subsecretaria de Desarrollo Político del Gobierno de Hidalgo, Bertha Miranda Rodríguez, aseguró que hasta el momento no se tiene previsto colocar vallas en las inmediaciones del Palacio de Gobierno con motivo de las manifestaciones del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
Durante su asistencia al Lunes Cívico en el Congreso de Hidalgo, Miranda Rodríguez fue cuestionada sobre las medidas de protección ante las movilizaciones feministas y la iconoclasia en edificios públicos. La funcionaria descartó que haya algún plan de resguardo con vallas metálicas.
“Hasta el día de hoy no hay ningún plan para que se pueda proteger”, afirmó la funcionaria, quien en años anteriores formó parte de colectivas feministas que marchan en esta fecha exigiendo justicia.
Sobre la postura de integrantes de “Mercadita Las Insurgentas”, quienes advirtieron que no permitirán la presencia de funcionarias en la marcha del 8M, Miranda Rodríguez respondió que no planea asistir, pues considera que estos espacios están dirigidos a mujeres fuera de las instituciones.
No obstante, señaló que ninguna mujer debería ser excluida si decide sumarse a la protesta.
“El tema de evitar que estén funcionarias públicas se ha señalado como una cuestión meramente electoral. Pero hoy no estamos en tiempos electorales, las funcionarias tenemos otros espacios donde podemos seguir impulsando los temas de género”, expresó.
Además, mencionó que espera que no se utilicen las causas justas para golpeteos políticos, en referencia al caso de abuso infantil en Zimapán: “históricamente no lo hemos visto, nunca se habían sumado en mis años como activista, nunca había visto hombres sumados con camiones y ver cómo este monstruo económico se movió”.
“Una sola muerte de mujer es señal de que todos fallamos”
Miranda Rodríguez también fue cuestionada sobre las críticas de colectivos feministas respecto a discursos revictimizantes por parte de autoridades. En este sentido, enfatizó que cada feminicidio refleja un fracaso colectivo.
“Cuando hablamos de la muerte de una sola mujer, es señal de que todos estamos fallando: las instituciones, la ciudadanía y la iniciativa privada”, aseguró.
Como ejemplo mencionó el caso de Rosaura, una joven asesinada junto con su familia por su expareja, un expolicía de Mineral de la Reforma, a pesar de haber presentado una denuncia.
“Rosaura no llegó a la mesa, pero tampoco los servicios de salud le brindaron la información necesaria, ni sus vecinos le indicaron dónde acudir. Ni siquiera su centro de trabajo le ofreció apoyo para evitar ser revictimizada. Eso demuestra que todos fallamos”, enfatizó.
Finalmente, la funcionaria hizo un llamado a los colectivos que han exigido justicia a acercarse a las instituciones y trabajar en conjunto para erradicar la violencia de género.
