La película seleccionada para la inauguración es la mexicana Agua caliente, ópera prima de Diego Hernández, realizada durante la pandemia, en casa de su madre en Tijuana.
Aunque podría considerarse como un diario documental de ese periodo, en realidad el realizador decidió hacer una ficción, que tiene como motor dramático el mal funcionamiento de un calentador, que hace que el agua salga muy caliente.
Diego y su madre realizan las actividades cotidianas como cocinar, regar el árbol del patio, componer un agujero por el que se metían los ratones, confeccionar cubre bocas caseros, o jugar con la perrita Luna.
La madre bromeará que en la ficción ella no se baña tan seguido, pero que en la vida real es muy limpia.
El momento más dramático del asunto es cuando Diego decide pedirle matrimonio a su novia Melissa sin siquiera tener el anillo, o un sitio en donde vivir.
Hernández recrea el aburrimiento pandémico de manera eficaz, lo que le valió estar nominado al premio Puma en el Festival Internacional de Cine de la UNAM del 2022,
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
