Un exhorto del diputado Miguel Ángel Martínez Gómez para que las secretarías de Salud federal y estatal y sus respectivos gobiernos fortalezcan las medidas de atención a personas indígenas ante el coronavirus (Covid-19) causó debate entre los asambleístas, quienes contrastaron el estado del sistema clínico en la entidad.
Fue en primer término María del Carmen Lozano Moreno quien acusó el estado actual de hospitales sin concluir, como el de Zimapán, y los pocos recursos para su conclusión, además de criticar la desconversión de otros que, expuso, son necesarios para la población; en otra oportunidad añadió que debería ponerse “especial” interés.
Ello, dijo, en la próxima aplicación de recursos y asentó que “especial” porque si se requiere una atención digna debe haber lo demás digno; en su misma intervención contrastó que si bien en dos años de pandemia se ha destacado, en los otros tres de mandato hay rezago: “Digo lo que veo”.
Su colega Adefa Zúñiga Fuentes describió algunas obras hospitalarias varadas como “huacales” y expresó que las mismas datan desde Enrique Peña Nieto (EPN) y pidió sean terminadas como la de Actopan; además, asentó que no solo es la infraestructura sino el personal que recibe poco pago y más en pandemia.
Por su parte, José Noé Hernández Bravo se sumó al planteamiento inicial y pidió que la información del patógeno sea traducida a lenguas maternas, pues manifestó que por falta de la misma hubo poco interés que derivó en fallecimientos de dicho sector poblacional.
En más comentarios, Juana Vanesa Escalante Arroyo si bien expresó que le agradaba escuchar que se ponía el tema de la salud en lo principal, también apuntó que hay un rezago no hoy, sino de hace tiempo atrás.
Revira Rico Ruiz: Salud ya no depende de estado
Ante lo anterior, el asambleísta del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Roberto Rico Ruiz, si bien se sumó al llamamiento de fortalecer la atención a sectores indígenas, respondió a los comentarios de sus antecesores sobre la precariedad del sistema de salud estatal y recordó que desde julio de 2020 este ya no depende de Hidalgo.
Pues recordó que fue traspasado al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que implica además de los servicios todo el inventario de inmuebles y además se haría cargo del personal: “Debe atender (el Insabi) al primer y segundo nivel clínico”, expresó, al decir que si bien compartía el exhorto este también debía ser a la federación en cuanto a recursos.
“Omar Fayad Meneses hizo un gran trabajo para poner a Hidalgo como referente en la atención a la pandemia y se preparó bien”, expresó el priista, al contrastar lo dicho por Zúñiga Fuentes de que no eran “jacales” pues las estructuras habían sido equipadas para atender a pacientes contagiados del Covid-19.
Sin embargo, retomó una vez más los hospitales inconclusos y considero que el otrora secretario de Hacienda, Arturo Herrera, dijo que gestionaba un amplio presupuesto al centro actopense pero ello no ocurrió; asimismo, agregó que no pretendía hacer un deslinde ni causar controversia; aunque reviró otra vez a Vanesa Escalante.
Pero le reiteró que ahora es una situación del Insabi y ello aclara desde dónde se opera la parte clínica: “Lo presente se atiende en lo presente y no culpar al pasado”, expresó, al apuntar que los servicios sí funcionaban anteriormente y se conformaron para hacerlos de primer nivel en cuanto a calidad.
Finalmente, Martínez Gómez compartió lo dicho por Escalante Arroyo ante el acompañamiento de poner la salud como principal ya que el debate es fundamental, pero ante ello consideró que no es para generar divisiones sino que invitó a unir esfuerzos para dar una respuesta: “El exhorto es para unidad, no división”, concluyó.
Finalmente, su propuesta fue turnada a la primera comisión permanente de Legislación y puntos constitucionales para ser analizada, discutida y de no contar con observaciones ser votada ante el pleno; al proyecto le acompañaron los cometarios arriba descritos.
