El coahuilense Francisco Ríos se convirtió en uno de los lanzadores más prometedores de los Diablos Rojos, desde sus inicios en la Liga Invernal, hace unos años.
Ríos comenzó la temporada pasada en el bullpen pero, al final, gracias a sus buenos trabajos, terminó abriendo juegos durante los playoffs. Ganó dos y perdió uno, con 3.94 en carreras limpias.
Su buen desempeño hizo que, a sus 25 años, se ganara una oportunidad en el campo primaveral de los Mets de Nueva York, pero después de salvar un juego fue enviado a sucursales; por eso, nos extrañó que los Diablos Rojos anunciaran que habían cambiado los derechos de retorno del jugador a los Acereros de Monclova por el lanzador mazatleco Sasagi Sánchez. Seguramente, pensaron que más vale pájaro en mano que ciento volando, pero no recordaron que ya han fracasado en negociaciones parecidas.
Negociaron los derechos de retorno de Karim García con los Sultanes de Monterrey, pensando que nunca regresaría a la Liga Mexicana; por eso, cada vez que se enfrentaba a los rojos, el pelotero los mataba a palos. Para tratar de minimizar su error, contrataron en la etapa final de su carrera al pelotero nacido en Ciudad Obregón, pero no duró mucho tiempo con ellos.
Solamente el tiempo mostrará si se trató de un error; por lo pronto, dio una nueva herramienta a los campeones Acereros para revalidar su corona.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.