No se van las bases del Partido Revolucionario Institucional (PRI), los y las presidentas de seccionales y municipales buscan reactivar a un partido que aún tienen mucho que aportar. “Quienes se fueron se habían ido desde tiempo atrás, pero sólo formalizaron la decisión en un show mediático”.
En entrevista con Marco Antonio Mendoza Bustamante, a días de tomar las riendas del Partido Revolucionario Institucional estatal, en la sede del Cubo de Colosio, enfatizó que firmaron un documento, formalizaron su decisión y montaron un show mediático, pero los y las diputadas no defendieron la voz de los hidalguenses en tribuna.
Consideró que se sirvieron del partido para llegar al poder, mientras que las bases siguen trabajando todos los días en territorio, sin que se les tome en cuenta. E informó que el pasado jueves se ingresaron a la Comisión de Justicia quejas en contra de actuales funcionarios públicos emanados del tricolor que afectaron a su partido político y las cuales serán investigadas.
Con 240 mil votos logrados en la última elección estatal, que fueron sólo para la gubernatura, el PRI se mantuvo como la segunda fuerza política, pero exactamente un año después, Omar Fayad, ex gobernador en la entidad, anunció su renuncia al tricolor en medio de rumores por el ofrecimiento de una embajada en Israel por parte del Poder Ejecutivo federal. Una semana después ocho diputados locales, afines al ex gobernate, publicaron su salida. Y el sábado emitieron lo propio 15 alcaldes emanados de este instituto político en 2020.
Ante la desbandada, Marco Mendoza Bustamante explicó que “los que se fueron ya se habían ido, desde tiempo atrás. Y no representan al PRI porque ellos llegaron a esos cargos por la militancia, pero no han sido esos servidores y servidoras públicas responsables y que respondan a las necesidades de los seccionales cuyos dirigentes son gestores, y dan la batalla en territorio».
Para Marco A. Mendoza, “los 240 mil votos de los y las priistas son a toda prueba, votan con convicción priista, el PRI en este momento no empieza desde cero, comienza desde sus bases”, afirmó el directivo, quien adelantó que estarán con los municipios y los seccionales, para revisar las condiciones en que dejaron a un partido político que durante los últimos meses lo dejaron caer a propósito.
“No es un barco a la deriva. El PRI es un partido en proceso de revolución en Hidalgo y lo vamos a conducir a un mejor puerto”, expresó el dirigente, al tiempo que reflexionó en que el tricolor tanto en lo nacional como en local nació desde el poder (nueve décadas atrás) y los mismos estatutos refieren esa verticalidad.
“Había un presidente de la República que era la fuerza moral del partido, los gobernadores eran esa fuerza en las entidades y estaban en su derecho de tomar decisiones, pero la realidad democrática de hoy es distinta”, y reconoció que a estas generaciones no les tocaron los tiempos de “carros completos o elecciones aplastantes”, pero sí la de consolidar la democracia, sostener al instituto político, mantenerse y recuperar terreno.
«En la legislatura federal pasada apenas se contaba con 36 diputaciones, pero en esta ya tenemos prácticamente el doble, nos recuperamos en un escenario de competitividad”, apuntó el recién nombrado dirigente estatal.
DATOS:
Marco Antonio Mendoza Bustamante, es militante desde los 18 años en el tricolor, y comenzó defendiendo una casilla electoral, y en los últimos años perteneció al equipo de abogados del instituto político. En 2022 coordinó la campaña a la gubernatura de Carolina Viggiano.
El también diputado federal agradeció a su instituto político los cargos, y al asumir la presidencia del Comité Ejecutivo Estatal expresó que “son momentos retadores. Aquellos que nos mantenemos leales, institucionales y amando a nuestro partido nos unimos y agrupamos en un sólo objetivo: el PRI”.