Bien dicen que más sabe el diablo por viejo que por diablo, porque este refrán le viene como anillo al dedo al PRI, que casi centenario y en Hidalgo con 92 años en el poder, no se duerme en sus laureles ni cae en temores ante la elección de nuevo gobernador el 5 de junio del 2022, sino que con la habilidad o mañas que dan los años está en un juego de ajedrez político, en que nada es verdad ni mentira y todo es según el cristal con que se mire, porque una cosa es lo que se ha querido hacer creer en el tema de la candidatura y otra lo que parece que se cocina como platillo final.
Hasta el momento hay una corriente de opinión en que se dice que la balanza se inclina por la diputada Carolina Viggiano y se cree que Israel Félix iría por Movimiento Ciudadano.
Y parece que no.
Porque Félix Soto acaba de decir que no tiene invitaciones del PAN, DE MOVIMIENTO CIUDADANO NI DE MORENA O DEL VERDE, Y QUE ESPERARÁ LOS TIEMPOS DE SU PARTIDO EL PRI.
De un solo golpe echa por tierra lo que algunos ya daban como un hecho, en el sentido de que iría por Movimiento Ciudadano y se pronuncia como priista dentro del juego de la sucesión.
Y parece que la balanza se inclina del lado de Israel en un juego de ajedrez medio diabólico del partido tricolor.
Sin duda «más sabe el diablo por viejo que por diablo» y este PRI es un diablo viejo que, si algo sabe, es jugar ajedrez político.
