De acuerdo a la sociología política magistral de Max Weber, existen diferentes tipos de liderazgo, del que destaca el de corte carismático que, en el caso del senador Cuauhtémoc Ochoa, no lo caracteriza y pone de manifiesto que sus virtudes políticas se orientan hacia otros escenarios de conducción de la palestra pública.
En estos momentos la izquierda condensa un capital político inédito en la historia de la nación, así como el predominio de los poderes públicos, donde la voluntad ciudadana ha empoderado al gobierno morenista.
El liderazgo de la presidenta Claudia Sheinbaum se centra en el conocimiento científico y empírico de su lucha social de la escena política y de la interlocución del pueblo, marcando con ello la guía de pensamiento donde la concordia, la inclusión y la disciplina política son los signos inequívocos del proyecto revolucionario de la Cuarta Transformación.
Hidalgo, en los planteamientos del Plan Claudia, ocupa el epicentro de reivindicación social que la presidenta Sheinbaum Pardo ha reconocido como una deuda histórica con las y los hidalguenses que, por más de nueve décadas, quedaron en el olvido y la negación política de los gobiernos del antiguo régimen. En este trazo, la comunión de la presidenta Claudia Sheinbaum con el pueblo de Hidalgo se extiende en la relación política con el gobernador Julio Menchaca.
Por ende, no se debe caer en la confusión del liderazgo ni de la escena política. La claridad pública debe primar como elemento esencial de una sola directriz: la 4T.
El desencuentro protagonizado por el senador Cuauhtémoc Ochoa con el secretario de Gobierno, Guillermo Olivares Reyna, se generó con un exabrupto amenazante que profirió mediáticamente y lo conminó a ejercer su encargo sin hostigamiento hacia los presidentes municipales en Hidalgo. Esta condición -que no sólo fue desmentida por Olivares Reyna y por el gobernador Menchaca Salazar- quedó en entredicho en la veracidad pública y fuera de lugar por no tener cabida con la realidad y escenarios políticos que vive Hidalgo.
Lamentablemente, la difusión mediática del desencuentro que protagonizó el senador Cuauhtémoc Ochoa causó y causa una incertidumbre política y social, donde se confunde el liderazgo de su actuación desde el Senado con la realidad endogámica del ejercicio público en Hidalgo.
No deben primar los liderazgos confusos o confundidos en la estructura política de los actores de Morena, que hoy tienen la responsabilidad de generar equilibrio y estabilidad política en las acciones de gobierno.
“El triángulo de hierro” -que tuvo en sus manos el control de los poderes públicos en el antiguo régimen- se creó con base al autoritarismo político, que impidió hacer de la democracia el sustento de la nación. El ascenso del gobierno de alternancia de Julio Menchaca es, a todas luces, producto de la histórica deuda de negación, beligerancia y abandono contra las y los hidalguenses que mantuvo la estructura política de las fuerzas del antiguo régimen.
En este escenario, el gobernador Julio Menchaca de cara a su tercer año de gobierno ha manifestado su plena confianza y satisfacción por el staff de su estructura burocrática que conforman secretarias y secretarios que desempeñan una labor vital en el esquema de gobierno y en las Rutas de la Transformación en Hidalgo.
En este trazo de reconfiguración de la democracia en la nación, la fuerza política morenista desde el Senado de la República no puede ejemplificar las estelas del “triángulo de hierro” que protagonizaron los manejos omnímodos (absolutos) del poder público en México, desde una casta política ciega que jamás respetó ni la democracia ni el Contrato Social.
La claridad política que prima en las acciones del gobierno de Julio Menchaca, no da lugar a confusiones ni liderazgos confusos. Quizá esta sea la mejor prueba empírica para que el senador Cuauhtémoc Ochoa comprenda que en el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum la democracia ha desterrado esos liderazgos confusos que primaron de manera vertical y autoritaria en los gobiernos del antiguo régimen y, en especial, en ese “triángulo de hierro” de su casta política.