Los vacíos que dejan los líderes carismáticos suelen aleccionar que la historia no se repite; lo cual implica que no hay destino manifiesto en una nación.
La proximidad política inédita de Andrés Manuel López Obrador y la presidenta electa Claudia Sheinbaum con el gobernador Julio Menchaca, ha puesto, por vez primera, a Hidalgo en el radar geopolítico de la nación, aumentando el flujo de inversión pública federal, la movilidad social y la presencia política de Morena en Hidalgo, que ya estrena en Luisa Alcalde una nueva era de liderazgo político.
La empatía política de López Obrador y Sheinbaum con el gobernador Julio Menchaca ha sido fundamental para construir un eje político de metropolización entre la Ciudad de México, Hidalgo y el Edomex; trazando con ello expectativas de referenciación económica y social que, sin duda, darán el salto cualitativo gubernamental de las Rutas de la Transformación en el plano de macro-obras en la continuidad de la 4T en Hidalgo.
En este trazo de vinculación política del gobierno de Julio Menchaca con la presidenta electa Claudia Sheinbaum, sobresale el rasgo distintivo de la continuidad política de López Obrador en la visión de Morena. Resalta el hecho de que Claudia Sheinbaum ha reiterado que los signos inequívocos de la austeridad republicana, el bienestar social y la preeminencia de la voluntad del pueblo, serán los sellos del 2º Piso de la 4T.
Estamos en una era de redefinición política. En los hechos, el sistema político en México ha sido transformado a contracorriente por el peso político histórico que marcó la institucionalización del antiguo régimen. Por ello, las transformaciones tanto en la hegemonía política que ha propiciado Morena como la ingeniería constitucional que ha dado paso a reformas sustantivas para la equidad social y la simetría de derechos, han empujado, materialmente, a que el discurso de la vieja guardia política, también oscile hacia el ánimo de la transformación del país (sólo que intentando restablecer sus canonjías).
Empero, el escenario de la transición de mando marcará un vacío de poder por las condiciones del capital político de liderazgo carismático que encumbró a López Obrador. Esta cuestión explica los movimientos estratégicos del ajedrez político que ha generado de manera vertiginosa en los últimos meses de su gestión el político tabasqueño en favor de “sanear” el poder de la presidencia en favor de la nueva estructura de gobierno que presidirá Claudia Sheinbaum.
Las claves de la continuidad política de AMLO.
I. Uniformidad política y cambio estructural
AMLO moldeó con singular uniformidad el pensamiento de Claudia Sheinbaum, dando paso al anhelo reivindicatorio del género en la política y perfilando a una mujer calificada para sucederlo. En el camino, disciplinó a los contendientes de Morena, entre ellos a Marcelo Ebrard, trazando las huellas de que lo que importaba en la sucesión presidencial era la preservación del cambio estructural del Estado.
II. Antivolatilidad de Morena
AMLO advirtió en su estadía como miembro fundador del PRD que el partido del sol azteca carecía de disciplina política y su primitivismo político impediría su consolidación como partido en la escena nacional, cuestión que a la postre, el tiempo le dio la razón. Morena fue siempre más que un movimiento político con la columna vertebral de López Obrador, creando las bases para que la formalidad política diera paso a un partido con mayores alcances de poder que lo que implicó el PRD. Morena se convirtió en la esperanza de México.
III. La transformación nacional
AMLO hizo cambios de forma y fondo en su vida política y, particularmente, en su ascenso al poder. Es importante señalar que la oposición jamás imaginó que los cambios estructurales que realizó López Obrador culminarían no sólo transformado el proyecto de nación, sino al sistema político y a la forma de hacer política con piso firme de voluntad ciudadana.
¿Qué escenario político se espera de la actuación de Claudia Sheinbaum frente a los vacíos de poder que deja AMLO?
La respuesta es lineal. La continuidad estructural que inició López Obrador será el sello de la administración de Claudia Sheinbaum. No habrá sorpresas gubernamentales, por lo que la disciplina política, el control programático del gobierno, la sobriedad gubernamental y la estabilidad política serán los signos distintivos de Claudia Sheinbaum y la continuidad de AMLO.
Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.