Uno de los platos fuertes de la XX Semana del Cine Alemán, que comprendió 20 filmes de reciente estreno, la retrospectiva Antes del exilio y un homenaje a Ana Seghers, es El guante dorado, la más reciente cinta de aclamado director Fatih Akin, que obtuvo el Premio del Cine Alemán y que se estrenó en la Berlinale del 2019.
La cinta adapta una novela de Heinz Strunk, ambientada en el Hamburgo de los 70, y narra una historia verdadera, que arranca de forma escalofriante, cuando vemos al soldador Fritz Honka (Jonas Dassler) cuando viola, mata y descuartiza a una vieja prostituta.
El repulsivo sujeto de cara deforme, al que las mujeres rechazan por su fealdad, visita regularmente el bar El guante dorado, donde no falta alguna borracha que acepte ir a su casa para seguir bebiendo. Todas se quejan del olor del lugar y es que, cansado de regar miembros por toda la ciudad, los guarda en un compartimiento secreto en su sala y cínicamente achaca el olor a “los vecinos griegos que se la pasan cocinando porquerías”.
Décimo hijo de una familia pobre que no los pudo mantener a todos, Fritz semeja ser un alcohólico social, que convive con los parroquianos del bar y con un hermano alcohólico como él; sin embargo, sus estallidos de violencia son mortales la mayoría de las veces.
El apreciable director de A la orilla del cielo y Soul Kitchen logra su filme más terrible, retratando a un malvado personaje que resulta repulsivo desde el primer momento.
Der goldene hamdschuh resulta, pues, un filme escalofriante y poco complaciente que lo estremecerá durante casi dos horas.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.