Redacción
Donald Trump tiene un respaldo en el presidente de Siria, Bashar al Assad, quien dijo que el veto a la entrada de sirios a Estados Unidos va dirigido a los terroristas, no a los ciudadanos, por lo que no lo ve mal.
«Es contra los terroristas que se infiltrarían entre los inmigrantes que van a Occidente. Y eso ha pasado. Ha pasado en Europa, sobre todo en Alemania», dijo Assad en la entrevista con la emisora de radio Europe 1 y la cadena de televisión TF1.
«Creo que el objetivo de Trump es impedir que esas personas lleguen». No va «contra el pueblo sirio», sostuvo.
El gobierno de Assad ha criticado a menudo a los estados occidentales por su apoyo a los grupos rebeldes sirios, considerados por Damasco como terroristas, y ha advertido que tal apoyo llevará a más ataques por el mundo.
Trump aún no ha establecido una política clara sobre Siria, pero ha indicado que podría poner fin al apoyo de Estados Unidos a grupos insurgentes, y ha dicho que quiere restablecer los lazos con Rusia, cuyo presidente, Vladimir Putin, es el mayor aliado de Assad a nivel internacional.