Debido al desfogue hídrico de una presa en el Estado de México, sumado a las probables lluvias que se registren en esa entidad y la capital nacional se estima otra posible inundación de igual o mayor proporción que a la registrada el lunes en la noche en varios municipios de la zona Tula-Tepeji, informaron autoridades de Hidalgo y federales en conferencia de prensa.
Al respecto, el gobernador Omar Fayad Meneses expresó que lo anterior “ojalá se quede en un alertamiento general”, sin embargo, expresó que preferían tomar precauciones como llamar a evacuar principalmente la colonia Centro de Tula de Allende y zonas cercanas al afluente en Ixmiquilpan, Tepeji y Tlahuelilpan; así como la restricción de regresar a las áreas ya afectadas.
De acuerdo con la explicación que dio, el Río Tula, que actualmente está al 130 por ciento de su capacidad, recibe desde la mañana un desagüe de aproximadamente 50 metros cúbicos por segundo (m3/s) de la presa Danxhó en Jilotepec, así como de los túneles emisores Oriente y Central que en conjunto sumarán una recepción de 270 m3/s a dicho afluente, pero además se sumarán las precipitaciones que pudieran registrarse.
Hay rechazo a desalojos
Ante el llamado anterior, el gobernador refirió que no han podido terminar de desalojar debido a resistencia de la población a abandonar sus viviendas por temor a rapiña, sin embargo, apeló a la conciencia de que al permanecer en las zonas se pone en riesgo la vida, aunque apuntó que no han obligado a nadie.
En ese sentido, explicó que la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), el Ejército y Guardia Nacional hacen labores de vigilancia para evitar ese delito en las casas y centros clínicos afectados.
Cifras preliminares
Por otra parte, al decir que “sé que hay un deseo por información”, evitó proporcionar cifras finales del desastre en la región al exponer que aún podrán variar, no obstante, compartió que hasta el momento hay 23 puentes vehiculares y seis peatonales derrumbados; además de 5 mil viviendas afectadas con la mayor cantidad en Tula de Allende: 3 mil.
También, 11 escuelas de diferentes niveles formativos han resultado dañadas, tres hospitales e igual número de tianguis comerciales, así como 10 balnearios de la zona; donde añadió que ya entabló una coordinación con la administración federal para declarar una zona de desastre y que el estado pueda acceder a recursos; “se necesitarán muchos millones”, señaló.
Aunque a la par, llamó a municipios vecinos e incluso de otras entidades a que brinden auxilio como en facilitar camiones tipo Vactor para drenar el agua; así como en la donación de víveres de primera necesidad.
Caso IMSS de Tula
Por otra parte, el mandatario bajó a 15 la cifra de decesos en el hospital general de zona de medicina familiar (HGZMF) cinco tras desconectarse los soportes vitales necesarios por el coronavirus (Covid-19), ya que explicó que otro de los fallecimientos no estuvo relacionado con la inundación al haber llegado ya sin vida y uno más presentaba una patología distinta.
Al respecto, apuntó que 13 cuerpos ya fueron entregados a sus familiares y del resto uno no había podido ser ante complicaciones en el papeleo y otro era foráneo y establecían el contacto para lo conducente, donde precisó que serán dadas todas las facilidades. Aparte de lo anterior, descartó que haya más personas muertas o desaparecidas por el desbordamiento.
Sin daño a presas: Conagua
Por último, el titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Germán Martínez Santoyo, descartó que las presas en la entidad, incluyendo las hidroeléctricas, hayan sufrido algún daño tras el sismo de 7.1 grados registrado ayer en la noche en Guerrero; aunque aseveró que ello no es el verdadero problema, sino las constantes lluvias que llenan los vasos de agua y estimó que si deja de llover en tres días podrían bajar los niveles.
