Los diferentes esquemas instaurados dentro del programa “Hidalgo Más Fuerte” permitirán salvar hasta 15 mil empleos en la entidad, explicó en entrevista José Luis Romo Cruz, titular de la Secretaría Ejecutiva de la Política Pública, quien agregó que ha habido una amplia respuesta del sector empresarial.
Un ejemplo de ello, dijo, son los créditos que han distribuido en un mes cerca de 40 millones de pesos de una bolsa de mil 500 millones, y que fueron diseñados específicamente para atender a firmas que han visto interrumpida su operación y por ende no pueden generar capitales.
La tasa para dichas subvenciones es al 13 por ciento con seis meses de prórroga y hasta cinco años para liquidarla completamente; además, en cantidades inferiores a 2.5 millones no se requiere garantía.
Asimismo, destacó la modalidad para otorgar energía limpia por seis meses mediante la instalación de paneles solares que permitirá ahorrar costos equivalentes a 20 posiciones laborales.
De lo anterior, el encargado de la política pública estatal subrayó que todo fue planeado en conjunto con el sector empresarial, quien hizo observaciones y, una de ellas, fue dar plazos a las hipotecas.
Por otro lado, en la charla con Adalberto Peralta, el funcionario compartió que el estado sigue siendo atractivo para la inyección de capitales, resultado de las acciones instruidas por el gobernador Omar Fayad Meneses, que fijó una meta a 12 meses para insertar 10 mil millones de pesos.
En ese sentido, Romo Cruz explicó que para facilitar el arribo de empresas han sido creadas medidas como pulir el componente de mejora regulatoria, reducir la burocracia y disponer de plataformas virtuales a los interesados para que su transición a la región sea lo más fácil posible.
Aunque aseveró que todo lo dispuesto en “Hidalgo Más Fuerte” no está destinado exclusivamente para las grandes firmas, ya que la entidad se compone de cerca del 80 por ciento de Pymes.
Finalmente, declaró que la inversión en obra pública también actúa como paliativo a los efectos de la contingencia sanitaria, hecho por el cual continúa la construcción de infraestructura y, además, fueron efectuados ajustes en el gasto corriente gubernamental para poder destinar más etiquetas presupuestales.
