Hace cinco años el director mexicano Jorge Ramírez Suárez se anotó el mayor éxito de su carrera con “Guten Tag, Ramón”, filmada en Alemania. Ya con ambiciones internacionales ideó “La gran promesa”, que es el estreno nacional de la semana.
Con la ayuda de Klas Beense, el cineasta ha elaborado la intrincada historia de Sergio Roth (Juan Manuel Bernal), quien trabaja como fotógrafo de guerra en Somalia para Jack (Alexander Holtmann), quien se queda con el crédito de las fotos. Alcanza a regresar para asistir al parto de su prometida, Stella (Ilithya Manzanilla), que se acababa de divorciar del soldado O’Connor (Sam Trammel), pero ella muere y por ley el militar se quedará con la hija, por lo que Sergio decide robarla. Tratando de detenerlo, O’Connor mata a una enfermera y es encerrado durante 26 años. Prófugo de la justicia norteamericana, Sergio encarga a su hija a sus amigos, Klaus (Gaston Yanes) y Elena (Alejandra Ambrosi) en Durango, con la promesa de que algún día regresará por ella.
Pocos filmes nacionales han tenido una producción tan impresionante, con locaciones en varios países europeos y ciudades mexicanas. Lo malo es que la historia es inverosímil, cae en terrenos de la telenovela y las actuaciones no son convincentes.
“La gran promesa” resulta eso: una promesa fallida que se puede ver por su producción y la bella fotografía de Martín Boerge, aunque sus dos horas se antojan excesivas.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.
