Fayad, el proyecto trasexenal

Omar Fayad Meneses está generando una postura fuerte ante el gobierno federal, porque las políticas que se pretenden instaurar en la llamada “cuarta transformación” ya fueron realizadas. Inmediatamente se intuye un proyecto trasexenal de gobierno, es decir, el titular del Ejecutivo de Hidalgo se catapulta a las ligas políticas nacionales a través de una candidatura ciudadana, no necesariamente fuera de un partido político, pero sí anteponiéndose como un personaje que emerge de la ciudadanía.

Son las políticas públicas y su correcta ejecución las que generan proyección en el ring presidenciable, perfectas para construir la premisa de una campaña mediática, pues en dicha carrera la estrategia de comunicación es vital.

Ahora bien, el grupo político que rodea al gobernador Omar Fayad es el conjunto de personajes que debe entender una cosa: se trata de un proyecto de lealtad y hasta renuncia de aspiraciones personales en pos del crecimiento de su líder político.

Muchos han comenzado a buscar hacer sus carreras políticas y despuntarlas, por lo que comienzan a pelear presencia en municipios o marcar a “su gente”, también a apuntarse en los cargos de elección popular, y otros apuestan a publicitarse por diferentes motivos.

Lo cierto es que están perdiendo de vista que integran el proyecto trasexenal llamado “Omar Fayad”, y olvidan que existen grupos políticos cuyos personajes renunciaron a diferentes oportunidades en pos de abonar y allanar el camino de su líder que hoy es un reconocido actor político nacional.

En el grupo gobernante existe un candidato natural a la sucesión: Israel Félix, que en todo momento ha declarado en público y en privado: “Soy leal a un proyecto: el del gobernador; dependo de su indicación”. En contraste, otras y otros están generando sus propias estrategias para sobresalir o hasta emigrar con Morena si les ofrecen bien.

En este tenor, muchos se preguntan por qué no nombramos cuadros cercanos al gobernador para la renovación de la dirigencia estatal del PRI, y la razón es que en su grupo político deberán concentrar todos los esfuerzos en destacar las políticas públicas para poder crecer a su jefe político a la candidatura presidencial, en el Estado de México y Sonora ya están generando campañas, mientras que el PRI Hidalgo deberá ser reconfigurado para hacerse competitivo en las siguientes elecciones.

Se trata de dos temas diferentes que requieren esfuerzos canalizados en rubros distintos, pues el tricolor deberá trabajar para cualquiera que sea el candidato presidencial y reivindicarse ante su militancia, mientras que el grupo del gobernador deberá concentrar esfuerzos en hacer un candidato invencible que pueda ganar hasta siendo independiente.