Verónica ANGELES
Raúl Arroyo, candidato a procurador del estado, reconoció que por falta de pericia de los ministerios públicos “se han caído” asuntos en la Procuraduría del Estado.
Aseguró que en su experiencia como magistrado de la Sala Penal le tocó ver falta de pericia, de experiencia en el litigio y deficiencia en la argumentación.
Ante ello, en su exposición frente a los integrantes de la Comisión de Seguridad Ciudadana y Justicia, propuso trabajar en dos ejes: uno para resolver el tema del ministerio público ante el nuevo sistema de justicia penal, y otro para realizar una reingeniería en la procuraduría.
“Trabajar sin dilaciones en fortalecer el Ministerio Público (…) por la experiencia veo que hay debilidades importantes, como fortalezas. Propongo que tengamos un MP homogéneo con toda la capacidad, conocimiento para que el funcionamiento del sistema penal sea óptimo y no fracase”.
Respecto de la reingeniería de la procuraduría explicó que se prevé que los ministerios públicos sólo trabajen en delitos de alto impacto.
Para que los delitos de alto impacto lleven la mayor atención del MP, y dejar los delitos que algunos denominan “de bagatela”, es decir, de poca importancia se desahoguen por la vía de la justicia alternativa.
“Debemos dar impulso a los mecanismos alternos de solución. Los asuntos de bagatela deben quedarse en acuerdo reparatorio, en una solución rápida y que el volumen no crezca y que la atención vaya a delitos de alto impacto y trabajar en el objetivo que es condenar delitos de alto impacto”.
Con ello se evitaría -por un lado- acumular asuntos y -por el otro- después crear un programa de abatimiento al rezago.
Finalmente se pronunció por separar el nuevo sistema de justicia penal del tradicional, de lo contrario hay riesgo de “traspasar vicios y lo vamos a contaminar”.