Uno de los estrenos más esperados de la temporada es el octavo episodio de la saga de “La Guerra de las Galaxias”, iniciada por George Lucas hace cuatro décadas.
La historia del director Rian Johnson es considerada como el equivalente actual de “El imperio Contraataca”, de Irving Kershner, considerada por muchos como la mejor de la serie, y narra que, agobiada por el Primer Orden, la Resistencia busca toda la ayuda posible y envía a Rey (Daisy Ridley) a buscar la ayuda de Luke Skywalker (Mark Hammil), el último Jedi que se ha refugiado en una lejana isla de la galaxia. Aunque se niega a regresar, Luke descubre en la chica la fuerza necesaria para enfrentar a Kylo Ren (Adam Driver). Mientras tanto, la princesa Leia Organa (la recién fallecida Carrie Fisher) y lo que queda de su flota tratan de huir del temible Snoke (Andy Serkis).
El director de “Asesino del futuro” y “Breaking bad” trata de respetar las convenciones del género y cumplir el relevo generacional que se da con el temerario piloto, Poe (Oscar Isaac) y el renegado Finn (John Boyega), además de la aparición de tiernas criaturas como los pollitos galácticos.
La película dura 152 minutos que a ratos resultan aburridos; sin embargo, “Star wars. The last Jedi” dejará complacidos a los fanáticos de la serie y a los amantes de la ciencia ficción, aunque no alcanza la excelencia de su antecesora.
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Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.