La semana pasada, la prensa local dio a conocer la noticia de una balacera en la casa de campaña de Benita Zarco, candidata por el PAN a presidenta municipal de Omitlán de Juárez.
Hechos oscuros rodean el caso, pues más que balacera parecieron tiros al aire, según cuentan los rumores: los Verdes Ecologistas comandados por Luciano Cornejo y José Luis Ordaz, que buscan amedrentar a los omitlenses para que voten con miedo.
Este tipo de acciones que pretenden instaurar el miedo como forma de vida en Omitlán sólo puede obedecer a decisiones desesperadas del PVEM al estar perdiendo fuerza en campaña y aceptación ciudadana, actos vandálicos surgidos del miedo de perder una candidatura que “a la mala” sintieron segura.
Se nota la desesperación de José Luis Ordaz Ríos, que días atrás se instalaba en un discurso que lo perfilaba como la opción sana para gobernar.
Todo indica que la mancuerna formada por José Luis Ordaz Ríos (PVEM) y Miguel Ángel Trejo Espejel (PT) se siente perdedora y suda desesperación, por ello recurre a la violencia para poder recuperar la “confianza” de los omitlenses; es que cualquiera en su situación haría lo mismo, tienen tantas deudas por su “campaña limpia” que de no ganar van a salir huyendo de Omitlán.
¿Por qué la desesperación por ganar Omitlán? Porque cuentan los habitantes que hay centenares de intereses económicos en el pueblo, la imagen del gobernador en la primera contienda electoral de su sexenio y miles de compromisos de trabajo con los finísimos “operadores políticos” que llegaron a “balacear”.
Un mejor panorama es el que se muestra para Benita Zarco, candidata del PAN, pues luego del atentado contra su casa de campaña, logró despuntar en medios estatales y generar atención entre los electores.
Otra que dio la sorpresa esta semana fue Estela Ríos, que siempre sí se animó a hacer campaña y dar batalla por el PRD en la elección extraordinaria de Omitlán, que postula como la mejor opción en las filas de izquierda porque Miguel Ángel Trejo Espejel resultó un pillo sin trabajo ni propuestas, pero muchas deudas y compromisos familiares.
Mientras Ulises Hernández Vázquez se colocó en la cabecera de las preferencias, con todo y la guerra sucia del PVEM-PT.
Como se los auguramos, amigos: es la búsqueda mezquina del PVEM-PT por volver a Omitlán un foco rojo, y ya tienen un grupo violento instalado en el municipio.