Mis únicos y queridos lectores, el hilo conductor de los hechos políticos, sólo en raras ocasiones, suele ser una hebra diferenciada de la madeja.
En el proceso electoral del 2 de junio de 2024, donde Movimiento Ciudadano encabezado por Jorge Álvarez Máynez en la disputa por la presidencia de la nación, Alejandro Alito Moreno, frente a la estrepitosa derrota que se avizoraba de la abanderada Xóchitl Gálvez, oriunda de Tepatepec -que por cierto le dio la espalda y no votó por ella, sino por Claudia Sheinbaum-, hizo un llamado a Máynez para que declinara en favor de Gálvez, cosa que el abanderado de Movimiento Ciudadano, a todas luces y reflectores, rechazó.
El rechazo a la petición de Alito por parte de Máynez le ganó credibilidad al hoy líder del partido naranja y lo catapultó hacia una fuerza que en Hidalgo ha ido creciendo y que dejó buenos números de los emecistas con la entonces nominación de Adriana Flores -que le arrebató 100 mil votos al PRI- y de Guillermo Peredo, que hoy esgrime una batalla de poder frente al dominio de cúpula en MC de Pablo Gómez, que se resiste a la renovación democrática del partido.
En este trazo, Alejandro Alito Moreno salió lastimado y debilitado de la postura de rechazo de Máynez. Este duro revés político que dejó en ridículo a Alito no quedó en el olvido, como no suele quedar nada en los corrillos políticos históricamente.
Infaustamente, en Jalisco, donde gobierna el emecista Enrique Alfaro, se ha suscitado un evento demoledor del hallazgo de una fosa clandestina que tiene en vilo al gobernador. Esta situación la ha aprovechado Alejandro Alito Moreno para hacer diversos señalamientos en contra del gobierno de Alfaro y en contra de MC. Las declaraciones de Alito han culminado en un intercambio de insultos con Jorge Álvarez Máynez, los cuales están, desde luego, precedidos por el rechazo político en la contienda que terminó con el ascenso de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Este desencuentro político entre Alejandro Alito Moreno y Jorge Álvarez Máynez no es aleatorio, es una hebra gruesa en el hilo de la madeja.
Debemos mirar en prospectiva. 2030 se presenta como el prolegómeno de los apetitos de las fuerzas del PRIAN para debilitar a Morena porque la derecha está consciente que no existe un escenario donde le pueda arrebatar el poder al proyecto de López Obrador que en el claudismo ha encontrado una fuerza inusitada. En este trazo, las fuerzas del PRIAN comprenden que debilitar a la izquierda, puede trazar hacia 2036 el tan anhelado reacomodo de fuerzas políticas que requiere para regresar al poder.
Precisamente en este laberinto de pasiones y fuerzas políticas, mis únicos y queridos lectores, la hebra de la madeja del cobro político se esgrime de manera directa entre Alito y Máynez.
Pongámoslo en el contexto de la psicología política. Alito busca en el resquebrajamiento de Movimiento Ciudadano, la vinculación paralela de eventos en Jalisco con el déficit en el control de la delincuencia e inseguridad que Morena arrastra desde los resabios del antiguo régimen. En esta idea, Moreno Cárdenas pretende hacer ver a un país devastado por la delincuencia, tratando de asestar un golpe a Morena diciéndole a Máynez “¿ya ves?, por no declinar en favor de nosotros, MC en Jalisco es una calamidad en seguridad como lo es el gobierno de Morena”.
Atomizar o dividir, es la estrategia del PRIAN. El cobro de la “deslealtad política” a Máynez es un mensaje de doble estándar de Alito para Morena.

Por: Carlos Barra Moulain
Carlos Barra Moulain es Dr. en Filosofía Política, su ciudad natal es Santiago de Chile, encuentra en el horizonte social su mejor encuentro con la historia y hace de las calles el espacio de interacción humana que le permite elevar su conciencia pensando que la conciencia nos ha sido legada por los otros.