Te buscamos María Fernanda

Avisa cuando llegues, mándame tu ubicación y de preferencia no vayas sola, son frases que las mujeres mexicanas estamos acostumbradas a oír y seguimos esas normas casi sin darnos cuenta, ya tenemos asumido que debemos tener cuidados especiales porque en México los casos de desapariciones forzadas y feminicidios están a la orden del día.

Europa siempre ha parecido un sueño de paz y tranquilidad, donde las mujeres pueden salir a la hora que sea, vistiendo lo que quieran sin tener miedo de que algo les vaya a pasar.

Hasta ahora.

María Fernanda Sánchez Castañeda es una mexicana que llevaba viviendo cuatro meses en Berlín -fue a estudiar una maestría- cuando un día desapareció, dejó de contestar llamadas y no abría la puerta de su departamento. Una de sus amigas llamó a sus padres para avisarles y al no poder localizarla volaron hasta la capital alemana para averiguar su paradero.

La última vez que la vieron fue el 21 de julio y, hasta el día de hoy, no se sabe nada de ella. En su habitación se encontraron su celular y computadora, por lo que no se puede seguir el gps de los dispositivos. Tampoco hay imágenes de ella en las calles, ya que la ley de protección de datos en Alemania es tan estricta que no se puede grabar en espacios públicos.

La Embajada Mexicana y la policía alemana trabajan de la mano

Los padres han declarado a diversos medios que están recibiendo toda la ayuda posible de la Embajada y que las autoridades mexicanas se están coordinando con la policía germana. Ya se logró que se emitiera una ficha de desaparición, que no es poca cosa.

En Alemania, si un adulto desaparece “la policía sólo iniciará una búsqueda si sospecha que la persona está en peligro o puede haber sido víctima de un delito. En caso contrario, la Policía Federal Criminal asume, según sus propias declaraciones, que todo adulto puede elegir libremente su paradero/estancia sin informar a sus familiares y amigos”, reza un mensaje por whatsapp que circula en estos momentos entre la población hispanohablante radicada en ese país europeo.

¿Cuáles son las líneas de investigación?

Hay dos. La primera señala que María Fernanda podría haber decidido desaparecer voluntariamente y la segunda, que fue una desaparición forzada.

A la oriunda de Querétaro se le busca en los canales con buzos y en el bosque, además, la sociedad civil hispanohablante está muy activa, pegan carteles y junto a sus padres “peinan” calle a calle la capital alemana. Pero no solo las personas que hablan español están en las brigadas de búsqueda, también otras nacionalidades se han unido y han traducido los carteles con la foto de María Fernanda a otros idiomas.

Vivir en Europa parece un sueño, pero también tiene sus bemoles

La policía alemana ha hablado de que María Fernanda sufría un “estado de vulnerabilidad emocional”, al parecer, porque solicitó información de un psicólogo que pudiera atenderla en español. Sin embargo, tanto sus padres como sus amigos aseguran que es una chica alegre con muchos planes para su vida.

Migrar es bien difícil, declara para Effetá Alejandra Balleza, mexicana que ha vivido en Alemania por más de 20 años, tienes que adaptarte a una nueva sociedad que tiene unos códigos culturales que no dominas, a un idioma diferente, a otro clima y cuando acabas de llegar no cuentas con una red de contención donde puedas expresarte y no es tan fácil poder integrarse y hacer amigos.

Balleza señala que la Embajada de México cuenta con un servicio llamado “ventanilla de salud mental” a la que pueden acceder todos los connacionales que así lo decidan y agregó que, en una reunión reciente con la Canciller Alicia Bárcenas, las mexicanas pertenecientes a la Red Global MX le solicitaron que los protocolos de protección consular se ajusten a la realidad y a las necesidades de las y los migrantes en Europa.