En los primeros cinco meses del año se integraron 797 carpetas de investigación por robo de combustible ante la Fiscalía General de la República (FGR). Por día se iniciaron 5.2 expedientes por hechos ocurridos en Hidalgo.
En comparación con el año anterior el aumento en las denuncias presentadas es de un 62.9 por ciento, pues en el mismo periodo del 2022 se registraron 489, con base en datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Dentro del fuero federal, el robo, trasiego, almacenamiento y comercialización de combustible extraído ilegalmente es el delito más común en la entidad, incluso muy por encima de reportes por detección de armas de fuego y explosivos, que alcanzaron las 112 denuncias ante la Fiscalía General de la República.
Información de la Secretaría de la Defensa Nacional refiere que el hallazgo de tomas clandestinas aún se registra con alta frecuencia en Hidalgo, y se suman otros delitos como detección de bodegas y espacios destinados para el almacenamiento del combustible robado, incluso en el área metropolitana de Pachuca.
Con un total de 3 mil 428 denuncias interpuestas por este delito en el país, el 23 por ciento ocurre en territorio estatal y en estos meses de nueva administración estatal suman ya 2 millones de litros decomisados.
En el 2021, Petróleos Mexicanos informó que se detectaron 4 mil 489 tomas clandestinas en Hidalgo y el combustible asegurado fue de 830 mil 566 litros, 380 vehículos y 62 predios por ser utilizados para la actividad ilegal, para 2022 las tomas clandestinas de hidrocarburos fueron 5 mil 534 y 252 de gas L.P., además de 24 túneles dedicados al robo a PEMEX.
