El equipo que hizo las contrataciones más rimbombantes, el favorito al título, fue sin duda Acereros de Monclova.
Los exligamayoristas Pablo Sandoval y Josh Reddick fueron anunciados con bombo y platillo, pero el Kung Fu Panda no bateó lo esperado y Reddick anunció su retiro.
El equipo no caminaba y, luego de ser limpiado por los Diablos en la capital, fue cesado el mánager, Mike Callaway, y sustituido por Matías Carrillo, quien encontró la fórmula que les permitió obtener el tercer lugar, con 54 ganados por 31 perdidos.
Siendo el equipo más enrachado, que empezó apaleando a los Toros de Tijuana, resultó ser una sorpresa que fueran eliminados en el sexto juego, por los Sultanes de Monterrey, calificando como los mejores perdedores; esto se antoja un fracaso, por la nómina y las expectativas.
Sin tantos reflectores, Ken Broxton se convirtió en un cañonero importante, con .356, 20 jonrones y 48 producidas, seguido por Addison Russell, .348, 24 y 74; Juan Pérez, .343, 20 y 75; Alex Mejía, .366, 8 y 59, y Rodolfo Amador, .315, 10 y 54.
Chris Carter tuvo una temporada discreta con .249, 18 y 46, y al final se reforzaron con Chris Roberson y Bruce Maxwell, un cátcher fuera de liga.
En el picheo, Wilmer Ríos se convirtió en el estelar, con 9 ganados, 4 perdidos y 4.47 en carreras limpias, seguido de Eduardo Vera, 6-4 y 5.72.
El exligamayorista Héctor Velázquez quedó a deber y en el relevo batallaron, hasta que Wifrin Obispo se hizo cargo del bullpen, recibiendo la ayuda de Sergio Romo, aunque al final ambos fallaron.
En suma, los Acereros son un equipazo, pero necesitan mejorar el picheo con alguien de la talla de Bartolo Colón, si quieren aspirar a un nuevo campeonato.
Por: Jorge Carrasco V.
Egresado de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM. Periodista activo desde 1981 en diversos medios. Especialista en temas internacionales, deportes y espectáculos. Autor de biografías sobre Pedro Infante y Joaquín Pardavé de Editorial Tomo.